La kasbah Shrarda de Fez, también conocida como Qasba Cherarda, es una de las muchas construcciones históricas que siguen en pie en Fez. En este post te contamos si se puede visitar y si merece la pena, además de darte algunos datos de interés sobre ella e indicarte en qué parte de la ciudad se ubica.
Dónde está la kasbah Shrarda
La kasbah Shrarda está cerca de la medina de Fez, concretamente al norte de la medina nueva: al comienzo de la avenida des Merinides, junto a la glorieta de la Plaza Kyoto. Se puede llegar hasta aquí a pie, en apenas 10 minutos desde algunas de las puertas del recinto histórico, como Bab Sbaa, aunque el camino es en ligero ascenso. Al tratarse de calles y avenidas anchas, puede resultar más adecuado tomar un taxi o utilizar un vehículo privado para desplazarse hasta aquí.
Qué es la kasbah Shrarda
Como indica su nombre, la kasbah Shrarda es una fortaleza histórica de la ciudad de Fez. Una de tantas pues, al haber sido capital y gran ciudad en siglos pasados, su medina histórica se rodeo de recintos militares y defensivos con diferentes funciones. Esta kasbah no fue quizás la principal de la ciudad, pero cumplía una función importante: la de proteger determinados bienes y grupos de población.
El nombre de Shrarda hace referencia a la tribu magrebí que ordenó la kasbah original, en un principio para conservar y proteger un bien muy preciado por ellos: el grano. De hecho, también recibía el nombre de kasbah el-jemis (“de los jueves”) porque frente a ella tenía lugar un mercadillo semanal. En cambio, la construcción que vemos en la actualidad data del siglo XVII, en tiempos del sultán Mulay al-Rashid, concebida para alojar a su guarnición militar.
Esta función explica su estudiada arquitectura: un gran recinto rectangular, con más de 500 metros en sus lados más anchos, altos muros almenados, más de una veintena de torreones y una gran torre albarrana octogonal en su esquina más cercana a la medina, con claras funciones de vigilancia.
Qué es hoy la kasbah. ¿Merece la pena verla?
Anteriormente explicábamos los usos históricos que tuvo la kasbah Shrarda, pero su función actual es muy distinta. En realidad, en su interior se aloja un hospital (Hopital Ibn El Khatib) y varias instituciones de formación, entre ellas un instituto de secundaria y otro vinculado a la Universidad Karaouine.
Por tanto, su interior no se puede visitar libremente de manera turística. Sólo se puede contemplar su exterior. La parte más pintoresca y fotogénica del recinto son sus puertas, en especial la occidental, que es a su vez la que utilizan los alumnos de secundaria para entrar y salir del recinto, por lo que suele haber un marcado ambiente juvenil en sus alrededores. Su puerta, de amplio arco de herradura apuntado con decoración cerámica alrededor de su alfiz nos remite a la arquitectura militar tradicional de diferentes épocas, y la torre albarrana nos recuerda la importancia de la vigilancia militar de este entorno.
Por tanto, desplazarse hasta aquí para conocer la kasbah Shrarda puede no ser la mejor opción para turistas generales, pero sí para los amantes de la arquitectura antigua. Por otro lado, puede resultar interesante venir a ella si en tu programa está la visita al cercano castillo-museo de Borj Nord, pues no se encuentra muy lejos de él. Además, en las inmediaciones del recinto hay algunos puntos elevados desde donde se pueden tomar fotografías panorámicas del entorno y de la medina histórica, lo cual puede ser otro atractivo para los que disponen de más tiempo libre en su programa.