Moulay Idriss Zerhoun es uno de esos lugares que mantienen toda su esencia original, en buena medida porque hasta 1917 era una localidad a la que no podían acceder los no musulmanes. Y aunque a partir de ese año se abrió ligeramente a los extranjeros, todavía es un lugar donde el viajero internacional es una rareza. En este post te contamos qué es, dónde está y por qué merece la pena visitarlo.
Qué es Moulay Idriss Zerhoun
Con el nombre de Moulay Idriss Zerhoun se conoce a una pequeña ciudad de apenas 15.000 habitantes, a escasos 30 km de Meknes. Los lectores más versados en la historia de Marruecos conocerán el nombre de Moulay Idriss: era descendiente de Mahoma y fue el fundador de la dinastía idrisí, la primera musulmana del país y la que gobernó este territorio entre los siglos VIII y X, con capital en Fez.
Y recibe este nombre porque aquí está su mausoleo y, por ello, es uno de los mayores lugares de peregrinación de todo Marruecos. De hecho, muchos son los que consideran este peregrinaje como la alternativa para quienes no tienen recursos para ir a La Meca. Pero no conviene confundir este mausoleo con el de su hijo, Moulay Idris II, que se encuentra en la ciudad de Fez.
Mausoleo Moulay Idriss Zerhoun
Por qué visitar Moulay Idriss Zerhoun
Al tratarse de una localidad sagrada, muchos de los espacios monumentales solo pueden ser visitados por los creyentes musulmanes, de modo que el turista extranjero que no profese esta religión deberá solo admirar su exterior. Así ocurre con el mencionado mausoleo de Moulay Idris y con las mezquitas de la localidad, entre otros.
Sin embargo, solo pasear por sus calles ya supondrá una experiencia muy pintoresca. Además, la propia ubicación de Moulay Idriss Zerhoun es espectacular: encajonada entre colinas verdes de olivos, en lo que supone una bonita combinación entre el color blanco del caserío y el verde de los árboles y de las tejas de cerámica que cubren muchos tejados.
Calles pintorescas Moulay Idriss
Por tanto, la visita de esta localidad se puede hacer en cualquier época del año. Pero hay dos momentos especiales que, si coinciden con tu viaje, le darán un carácter especial. El primero, desde mediados de noviembre, cuando comienza a recogerse la oliva y muchos puestos y establecimientos se llenan de productos a base de aceitunas.
Y el segundo momento, cuando se celebra el Moussem de Moulay Idriss, una fiesta que atrae a peregrinos de todo el país y que llena de color y música sus calles. Se realizan desfiles callejeros, con hermandades sufíes, gremios profesionales y tropas folclóricas (Hmadcha, Aissoua, Hal Touat) haciendo demostraciones y buscando el ansiado éxtasis místico que lo conecte con el santo.
No obstante, debes saber que es una fiesta muy particular, donde no es habitual ver a demasiados turistas y en la que resulta fundamental mostrarse respetuoso con el ambiente. Por ello, si tienes pensado visitar Moulay Idriss Zerhoun, especialmente durante el moussem, te recomendamos ponerte en manos de una agencia experta en este país, como Turismo Marruecos: sabremos organizar una experiencia inolvidable, incluyendo para ello transporte privado, alojamiento y cualquier otro servicio que necesites.
